Mansory Pugnator: un espectáculo de mal gusto

Mansory Pugnator: un espectáculo de mal gusto

Mansory ha vuelto a demostrar su distintivo estilo extravagante con su última creación: el Mansory Pugnator, una versión del Purosangue. Aunque la compañía había sorprendido anteriormente, parecía que el sentido del buen gusto había hecho una pausa, pero ahora nos sorprenden con esta obra de arte avant-garde.

El Pugnator es un despliegue de personalización excesiva, despojando al Purosangue de cualquier indicio de elegancia. Los diseñadores de Mansory han optado por una estética tan exagerada que parece que han afectado su visión al crear este modelo.

La carrocería ha sido adornada con una sorprendente cantidad de piezas aftermarket, todas con un acabado en carbono forjado rojo. El resultado es un vehículo que, a simple vista, parece una explosión de creatividad desmedida, que luego fue ensamblada con pegamento.

El interior no ha sido ajeno a estas transformaciones. Completamente recubierto de cuero blanco con acentos rojos, el interior incluye detalles en carbono rojo. Para quienes consideren que la combinación de blanco y rojo es muy llamativa, hay opciones para personalizar aún más los colores.

En cuanto a la potencia, el Mansory Pugnator ha aumentado su desempeño, alcanzando los 755 caballos de fuerza, lo que significa un incremento de 30 caballos respecto al modelo estándar. Este aumento se logra gracias a un nuevo sistema de escape y un poco de tuning. Sin embargo, es poco probable que se note una diferencia significativa al conducir.

El costo de esta extrema conversión no ha sido revelado, pero lo que está claro es que cada euro gastado en Mansory puede considerarse excesivo.