El gobierno impulsa la energía para vehículos eléctricos
¡Compra un vehículo eléctrico! El gobierno está tomando medidas para garantizar el suministro de energía. Así es, aunque parezca inesperado, el actual gabinete de derecha, considerado por la oposición como negacionista del cambio climático, ha decidido actuar en el suministro eléctrico, algo que el anterior gobierno más pro-clima dejó de lado.
Durante el mandato del gabinete Rutte IV, ya se había llegado a la conclusión de que comprar un vehículo eléctrico no era recomendable debido a la falta de energía. Ciudades como Utrecht incluso tuvieron que apagar los puntos de carga durante los picos de demanda eléctrica debido a la saturación de la red. Obtener una conexión eléctrica para una nueva empresa ahora podría tardar hasta 2026.
A la cabeza de este gabinete, Sophie Hermans ha pasado de ser una figura crítica a convertirse en la ministra de Energía. Aunque la administración ha sido catalogada como negacionista y de extremos, parece que tienen un compromiso serio con el medio ambiente. Esta nueva coalición está implementando el más estricto plan eléctrico registrado.
El gabinete ha decidido invertir en un paquete de medidas urgentes para aliviar la creciente presión en la red eléctrica, que actualmente enfrenta una saturación preocupante.
Se planea construir hasta 55,000 nuevos transformadores para solucionar la falta de capacidad al conectar viviendas y empresas, lo que resulta vital para impulsar la sostenibilidad de la industria y crear empleo, según informa el medio Telegraaf.
Este esfuerzo es esencial porque los objetivos planteados en el plan climático con el horizonte de 2030 parecen estar fuera de alcance. Las cuatro fuerzas políticas ecológicas en el gabinete buscan acelerar la electrificación del país, a lo que la ministra se ha comprometido plenamente.
Además, se ajustará el sistema de tarifas eléctricas, priorizando el consumo eficiente del hogar y las empresas, lo que evidentemente conllevará un impacto en el bolsillo de los consumidores. Este nuevo enfoque recuerda a los contratos de energía flexibles, donde el precio de la electricidad varía a lo largo del día.
Sin embargo, hay críticas en torno a una posible erosión del estado de derecho, ya que se reducirán los plazos legales para impugnar la construcción de líneas de alta tensión, con el argumento de que es de interés social urgente.
¿Es todo esto realmente una buena noticia? Dependerá de a quién se le pregunte. Mientras que algunos medios de comunicación celebran las soluciones de la ministra, otros advierten que alcanzar el objetivo climático de 2030 es cada vez más incierto, señalando que la responsabilidad recae también en administraciones anteriores que no avanzaron lo suficiente en esta dirección.
Para concluir, todos los ojos estarán puestos en el próximo debate en la Cámara de Representantes, que probablemente se centrará en la controversia política actual, en lugar de en el contenido y las soluciones necesarias.